[Prensa] - Digital24horas - Incidentes en la manifestación Contra la Violencia de Género celebrada ayer
Durante la manifestación de ayer en contra de la Violencia de Género, la Concejala de Igualdad, Carmen Domínguez, dio un claro ejemplo de lo que son capaces de dar de sí algunos de nuestros representantes cuando ostentan un "carguillo".
Con un peculiar "talante democrático", Domínguez intentó expulsar de la manifestación a los familiares de un joven linarense acusado, y condenado, por violencia de género a pesar de las numerosas pruebas de que la causa contra él se fundamentó en pruebas dudosas y en lo que su familia y círculo de amigos califican de denuncias falsas. Los familiares del joven portaban una pancarta en la que aparecía la frase "No a la violencia de género. Basta de denuncias falsas".
Como ser Concejala Delegada le da a Domínguez una autoridad quasi absoluta, la Concejala, ni corta ni perezosa procedió a llamar a las fuerzas del orden para que expulsaran de la manifestación a los "indeseables". Sin embargo, la Policía Municipal, con absoluta profesionalidad, tras dialogar con los portadores de la pancarta, rechazó la posibilidad de obligarlos a abandonar la escasa comitiva que componía la manifestación. "No están haciendo nada ilegal, ni la pancarta contiene alusiones ofensivas o contrarias a la ley" fue el diagnóstico de los agentes.
Cabe preguntarse qué era exactamente lo que molestaba a la concejala. ¿Le pareció deplorable a Domínguez la primera parte del texto de la pancarta en la que se rechazaba la violencia de género? No parece probable, ya que el objetivo de la actividad era ése mismo. ¿Sería la segunda parte de la pancarta la que "puso de los nervios" a la Concejala de Igualdad? No debería ser así. Las denuncias falsas son un fraude de ley, son el amparo de desaprensivos y desaprensivas que se aprovechan de la ley para hacerle daño a sus parejas utilizando los recursos que pagamos los demás y haciendo uso de policía y judicatura para consumar una venganza personal.
Rechazar la violencia de género es una noble demanda que engrandece a quien la hace. Condenar las denuncias falsas es, asimismo, un derecho ciudadano.
Por otra parte, creerse en la posesión absoluta de la verdad y utilizar, o pretender utilizar, los recursos del sistema, como la policía, para silenciar a los que no piensan como nosotros era lo que hacía Franco y los españoles ya dejamos en su día claro que no era ése el estilo que deseábamos en nuestros gobernantes.
La intolerancia totalitaria no conoce de colores políticos ni de sexos. Está claro.
Texto: Rafael Ordóñez Bedmar
Fotos: Tony
PROCEDENCIA DEL ARTICULO: http://www.digital24horas.com/mm/articulo.jsp?cat=linares&menu=portada&new=354883
4 comentarios
hola -
TONY FOTOS -
julian -
julian -
SALUDOS Y SUERTE NIEVES