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Nieves Moreno Gallardo

LA INCONGRUENTE JUSTICIA I I (Caso Farruquito)

El pasado miércoles 13 de enero se publicó en diversos medios la trayectoría penitenciaria del bailaor que, mientras conducía un vehículo de alta gama sin carnet de conducir y a una velocidad bestial, atropelló a un peatón causándole la muerte, tras lo cual se dio a la fuga sin prestarle auxilio. Posteriormente mandó a reparar el coche y, cuando fué descubierto, en primera instancia declaró que el autor del atropello fue su hermano, a sabiendas de que, como este era menor de edad, la justicia sería más benevolente.

Tras trece meses de prisión, a Farruquito le fue concedido por la Junta de Tratamiento, el tercer grado penitenciario. Más tarde, cuando hubo cumplido dos tercios de la condena se le aplicó la libertad condicional. Por último, y como ya digo al principio del artículo, a mediados de enero de 2.010 ha sido puesto en libertad total tras extinguirse su condena.

Pero ¿donde está la incongruente justicia que indico en el titulo? Pues resulta que, según un programa de TV1 donde se daban todos los detalles, la totalidad de la condena impuesta a Farruquito era de tres años. ¿Cómo es posible que mi hijo esté pagando cuatro años y dos meses, sin haber matado a nadie, sin haberse dado a la fuga y sin haber culpado a nadie de nada y sobre todo sin haberse encontrado ni una sola prueba contra él (solo los cuentos chinos de la denunciante y sus cómplices "familiaresamigos") y, en cambio, este flamenco que tene una muerte a sus espaldas (sin permiso de conducir y con omisión del socorro) solamente haya pagado tres años?

¿Al Consejo de Ministros y al Consejo General del Poder Judicial no se les cae la cara de vergüenza de esta gran injusticia?

Nieves Moreno Gallardo

1 comentario

lidia -

Es vergonzoso ver como un asesino esta en la calle y mag alli dentro, ese señor no ha echo ni tres años de carcel, ya que por buen comportamiento solo tenia que ir a dormir, esta claro que el que tiene padrino se apadrina, en este mundo los inocentes pagan lo que hacen los culpables