Blogia
Nieves Moreno Gallardo

YA QUE ESTAMOS (Por Francisco Javier Pérez Muñoz)

Es increible que en el siglo XXl nos dejemos embaucar por quien nos presenta una realidad falseada. Cómo algunas y algunos individuos manipulan a su antojo la realidad, sin tener el más mínimo respeto, sensibilidad y escrúpulos, creando un estado de shock que llega afectar con tanto dolor el plano familiar prácticamente sin darnos explicación medianamente convincente. ¿ES PROBABLE QUE ALGUNAS PERSONAS FALSEEN SUS DENUNCIAS POR VIOLENCIA DE GÉNERO AUMENTANDO LA GRAVEDAD DE LOS HECHOS DENUNCIADOS? Evidentemente SÍ  ¿Por qué?. Muy sencillo. Porque no todas las personas somos justas. Está bién, y es de lógica, que sea condenada una persona que comete un delito, pero no es nada justo condenar a alguien indiciariamente por tal imputación, sin ninguna prueba objetiva. Pero desgraciadamente la realidad es otra: Que hasta la misma justicia se vulnera a sí misma.

El pasado fin de semana estuve de permiso en concreto el día 19 de marzo, día del padre. Amigos y amigas, no os podéis imaginar el dolor tan grande que puede sufrir un padre que, si lo sois, imaginad por un momento esta situación. Es muy duro despedirse de la familia cuando tienes que regresar a prisión, pero más inimaginable fue mi dolor cuando tuve que despedirme de mi querido hijo JAVI . Hubiera preferido honestamente que me cortaran mi mano. Mientras preparé su comida a mediodía, mis ojos y los suyos denotaban una inmensa tristeza, ya que ambos conocíamos que, por un largo tiempo, nos iban a privar del estrecho vínculo que evidentemente tenemos como padre e hijo. Pero cuando honestamente hubiera preferido que me cortaran una pierna  fué cuando tuve que despedirme de él. Fue muy duro. Los dos, con los ojos encharcados en lágrimas. Ninguno de los dos queríamos separarnos pero así es como lo ha querido su madre para nosotros. Se me cayó el mundo encima. Sé partieron mi corazón y mi alma cuando lo acompañe un cierto tramo y mi hijo, con una edad para no sufrir, era arrasado por una inmenza tristeza. Éramos como dos imanes que únicamente podían separarse dándonos la vuelta para no vernos.  Pero yo con el corazón endurecido después de tanta barbarie, tuve que dejarlo caminando solo a su casa para no quebrantar la orden de alejamiento. Caminó solo hasta su casa y, dicho sea de paso, allí permaneció solo porque su madre en Córdoba de fiesta, celebrando la llegada de la primavera o cualquiera sabe. No pude evitar mirar cómo mi niño se marchaba cabizbajo con su macuto en la espalda. Ya no puedo escribir más sobre esto se me parte el alma.

Con este artículo quiero poner de relieve la existencia de denuncias falsas  y manipuladas porque es evidente que, cuando se quiere quitar del medio al plasta del marido. Por el que, YA QUE ESTAMOS ¿Por qué no cuanto mas tiempo mejor?.

Sólo espero que todas estas personas algún día prueben de su propia medicina.

0 comentarios